domingo, 30 de junio de 2013

Reflexionemos

Títeres robotizados: “Consigue una vida. Una vida real, tu vida no es todo eso que ves en la televisión”

Tu vida no es todo aquello que refleja lo que quieren que seas, tú no eres lo que dicta una minoría, o no tienes por qué serlo. Para empezar, nuestra vida se basa en todo aquello que vemos e imitamos. El aprendizaje del ser humano se basa en ver, imitar, y así aprender. ¿Nunca has oído que los niños imitan lo que ven? Esa es la razón por la cual, desde que somos niños, hemos imitado todo lo que hemos visto por la televisión, o todo lo que nos han enseñado en el colegio o, en general, en la sociedad que nos rodea.

Si por un momento te paras a observar todo lo que sucede a tu alrededor, te darás cuenta de esto: gente que imita y sigue a otra gente. Por muy exagerado que a priori pueda parecer, en realidad si te fijas es así todo el tiempo. La mayoría de nosotros lo único que hacemos una y otra vez es imitar todo lo que vemos porque, de lo contrario, nos exponemos a ser criticados o rechazados por los demás. La gente que se comporta diferente o tiene ideas distintas, es directamente excluida, porque solo escuchamos a aquellos que siempre nos han “dirigido”, aquellos que, desde niños, nos han enseñado que tienen razón. Nos han enseñado a formar parte de un grupo y nos han enseñado lo que se supone que está bien y lo que está mal. Un claro ejemplo de esto son las famosas modas: “Un uso o costumbre que está en boga en determinada región durante un cierto periodo. Se trata de una tendencia adoptada por una gran parte de la sociedad, generalmente asociada a la vestimenta.

La moda puede ser definida como un mecanismo que regula las elecciones de las personas ya que, por una especie de presión social, indica a la gente qué debe consumir, utilizar o hacer. La moda se convierte en un hábito repetitivo que identifica a un sujeto o a un grupo de individuos”.

En lo que concierne a las modas, la gente que las sigue suele decir “Yo me pongo así o actúo de cierto modo porque <<Se lleva>>. Puede ser que ni siquiera te guste llevar cierto tipo de ropa o actuar de determinada forma pero, aun así, lo haces porque “se lleva”. Pues así ocurre con todo. Si una gran mayoría de personas sigue a algo o a alguien, independientemente de que tú compartas sus mismos gustos o su misma opinión , en la mayoría de los casos (siempre hay alguna excepción) te unes a ese grupo por moda o simplemente por aceptación social (Deseo de integrarte en un grupo y tener aceptación por parte de este). Sin embargo, hay un reducido grupo de personas que prefiere tener una opinión y/o actitud propias, y precisamente por ello, son apartados. 

¿Qué problema hay con esto? ¿Qué sucede con la realidad que nos rodea? ¿Por qué no paro de escuchar esas tonterías de que somos nosotros los que hemos de cambiarlo todo ¿Qué hay que cambiar y por qué? ¿Y por qué no vamos a poder cambiarlo? Pues bien, lee atentamente, porque esto es tu vida en realidad:


Ahora dime algo: ¿Crees que, en realidad, la sociedad que ves en esta pirámide difiere algo de la sociedad actual? Piénsalo por un momento porque, es tan evidente, que ni siquiera hacer falta hacer algún tipo de comentario aclarativo. ¿Qué ocurre? Que gracias a la televisión y los medios de comunicación este sistema ha sido “adornado” para que tú lo concibas de tal modo que lo asumas como algo normal. Puede que, a priori, todo esto resulte chocante, y te diré algo: a mí también me resultó chocante cuando lo descubrí. De hecho, ni siquiera quería creerlo. “Si todo esto es así, es demasiado” y así es, resulta demasiado para que puedas soportar que sea verdad.

Para que nos entendamos todos un poco, intentaré resumir lo anterior con una explicación más o menos sencilla y que todos podemos entender:

Para empezar, los seres humanos no tenemos remedio, se sabe que esto es así desde tiempos inmemorables. De todas maneras, esto puede ser discutido en otro momento, con lo cual iré al grano: en realidad todo eso que siempre has escuchado es cierto. Puede que nunca hayas oído hablar de algo como “Somos esclavos de una sociedad basura” o “La gran mayoría ignora todo lo que sucede en realidad, todo es mentira”. Si no lo has hecho, aquí tienes la oportunidad de descubrir algo nuevo. Si lo has hecho, aquí tienes la oportunidad de descubrir aquello que sospechabas pero aun no sabías.

Pues bien, nacemos. Nos regalan una vida, algo que ha de ser concebido como maravilloso, excepcional. Supongo que en nuestros primeros años de vida aun nos dejan algo de margen, y después comienzan a robotizarnos. Puede que suene fuerte pero, en mi opinión, es la palabra que mejor lo define, ya que es un proceso en el cual hacen que todos nosotros actuemos, más o menos, de igual forma, pero sin que nos demos cuenta. De esta manera, podría decirse que nos programan como a robots. “Has de aprender esto. Esto es lo correcto, esto que te enseñamos es lo que debes hacer”. Y todo es así, los primeros años de vida comienza el proceso de “robotización”. Y luego ¿qué? En la escuela aprendes todo aquello que ellos consideran que está bien. Luego, si tienes opción puedes seguir estudiando, y cuando acabas tus estudios, tienes una sola opción: trabajar. En el caso de que lo consideres como dos opciones, puedes verlo así: o trabajar, o morirte de hambre. Si no trabajas y no ganas dinero, no podrás mantenerte a ti mismo ni a tu familia, y todo esto está sistematizado por el capitalismo. En resumen, somos una sociedad dirigida y programada por un sistema llamado Capitalismo. 

Todo funciona con dinero, y unos pocos lo tienen todo, mientras que la gran mayoría vive con lo justo para vivir, menos o nada. De todo ese dinero que ganas trabajando, gran parte va dirigido al Estado, unos impuestos que has de pagar sin ningún motivo, ¿Por qué has de pagar unos impuestos a alguien que te dice cómo has de vivir y/o actuar? ¿Pagas por respirar? ¿Por existir? Ellos se labran su vida a tu costa, y lo único que tú puedes hacer es ver, oír y callar (Y seguir trabajando para no morirte de hambre). Ahora bien, tú te preguntarás: ¿Cómo lo hacen? ¿Qué forma tienen de dirigirnos? Pues bien, lo han hecho siempre de la forma más fácil y sin que tú te des cuenta: aquí entran los medios de comunicación. Todo lo que ves en televisión está hecho para ello y/o destinado a ello. La televisión su mejor arma porque saben que es algo que todo el mundo ve, que todo el mundo imita (aquí vuelvo a sacar lo que comenté al principio: imitamos lo que vemos) y mediante este medio pueden hacer contigo absolutamente todo lo que quieran. Con lo cual: una gran mayoría que trabaja para unos pocos. Y aquí es precisamente a dónde yo quería llegar: ¿Acaso el modelo social del siglo XXI difiere, en realidad, del modelo social de la Edad Media? Reflexiona sobre ello.

Dirigen nuestras vidas y nosotros obedecemos, la mayoría de la gente sin ni siquiera hacerse preguntas. ¿Has oído hablar de la esclavitud? ¿De los ricos y los pobres? ¿Por qué nunca te has preguntado por qué has de trabajar horas y horas para poder vivir? ¿No te das cuenta de que la gran mayoría trabaja para unos pocos? ¿No te das cuenta de que les estáis pagando sus mansiones y sus caprichos sin que ellos hagan absolutamente nada? ¿No es eso en realidad lo mismo que aquello en lo que se basa la esclavitud? ¿Por qué hay ricos? ¿Por qué hay pobres? ¿Por qué existe el dinero? ¿Acaso hay algún motivo por el cual todo ha de ser así? ¿Qué le encontráis de bueno a una sociedad en la que todo se puede comprar? Y si te das cuenta, ¿qué? En realidad lo sabéis, pero claro, es más cómodo ignorarlo y seguir con tu vida. Pues tu vida, amigo, no es esa que se basa en todo lo que te cuentan por la televisión, tu vida no está escrita ni ha de ser controlada por nadie, tu vida solo debes elegirla tú.

En realidad, si me paro a pensar, llego a la siguiente conclusión: en realidad siempre he sabido esto, o siempre lo he estado buscando pero hasta ahora no me había dado cuenta, estaba buscando algo a ciegas y, del mismo modo, a ciegas lo he encontrado. ¿Qué ocurre? Últimamente he descubierto que ciertas películas que me gustaba ver cuando era pequeña, o simplemente música que me gusta escuchar normalmente, contienen mensajes que para mí estaban ocultos, y que poco a poco han ido saliendo a la luz. Era algo que siempre había estado ahí y yo trataba de encontrarlo, pero ni siquiera sabía qué buscaba. Cuando llega este momento, te alegras y a la vez, te desmoronas. No puede ser que haya tardado tanto tiempo en darme cuenta.

Por otro lado, parece ser que solamente los jóvenes nos paramos a reflexionar sobre este tema. Todo lo que he oído o leído acerca de este tema, estaba dicho por gente joven, más o menos de mi edad. Quizá sea así porque es el círculo en el que me muevo, aun así, es algo que me tiene bastante sorprendida. En realidad, si te paras y observas a tu alrededor parece que nadie se da cuenta de esto, con lo cual a veces, lo único que puedes hacer es cerrar los ojos e intentar que te afecte lo menos posible, algo que, la mayoría del tiempo es imposible. 

Está claro que no podemos culpar a la gran mayoría porque nos tachen de raros, o porque no entiendan nuestros ideales. No podemos culparles porque no se hagan preguntas, o porque no intenten cambiar nada o, simplemente, porque no entiendan qué está ocurriendo. En nuestra sociedad, desde que somos pequeños, hemos sido educados de tal manera que el principal objetivo perseguido ha sido que no podamos pensar por nosotros mismos. ¿Qué pasaría si los que pensamos de esta forma, en vez de una minoría fuésemos millones y millones de personas? ¿Te has preguntado qué ocurriría?

"El sentido de tu existencia es INFINITAMENTE GRANDE, tan grande que ni lo imaginas y, sin embargo, la realidad de tu vida no es más que un conjunto de programas mentales impuestos que gran parte has adquirido por los medios de comunicación y que te impiden pensar con claridad, sin embargo, TU VERDADERA IDENTIDAD que de ninguna manera está limitada a tu cuerpo físico sino a UNA ETERNIDAD ESPIRITUAL que aún no conoces por ser víctima inocente de una manipulación que nos ha mantenido como títeres inertes en toda la historia de la humanidad".

Nota: en principio no sé qué impresión puedo causar, ya que sé poco o nada acerca de este tema. Hace tiempo que quería escribir algo pero no sabía cómo hacerlo, tampoco sabía muy bien qué decir. Hoy creo que, por fin, he encontrado la manera correcta de expresar todo esto. He leído sobre ello pero, salvo el último párrafo, todo lo escrito anteriormente está basado en una creencia propia, esta es mi opinión acerca de lo que ocurre hoy en día, y mi intención no va más allá de querer compartirlo y conocer el resto de opiniones. Esto tampoco tiene mucho que ver con el contenido que suelo publicar en mi blog, aun así, he sentido la necesidad de soltarlo.

miércoles, 26 de junio de 2013

Disordered

We are the reckless, 
We are the wild youth
Chasing visions of our futures
One day we'll reveal the truth
That one will die before he gets there.

And if you're in love, then you are the lucky one, 
'Cause most of us are bitter over someone.
Setting fire to our insides for fun, 
To distract our hearts from ever missing them.
But I'm forever missing him.


Well, I've lost it all. I'm just a silouhette, 
A lifeless face that you'll soon forget.

Silhouette

"Stare at the stars, think about life and immensity, drive at night with all the city lights blinding you. Lay on your bed, on your backyard lawn or on a roof, just wondering about what would happen if your dreams did come true".


sábado, 22 de junio de 2013

Rumbo incierto

Viaje posible hacia un no-lugar.
Materia oscura llena de vacíos.
Recuerdos falsos.
Y alzo el vaso, más vacío que yo,
lo elevo hacia el infierno.
Por lo que jamás seré,
niego al mundo como es.


No recuerdo una anti-historia mejor, de contenido incierto.
Sin brindar, celebraré los días no vividos.

viernes, 21 de junio de 2013

Lo confesaré


Ha vuelto aquella fiebre de siempre. Por la ventana desnudaba a la mitad de la gente: ¿Por qué sus vidas me parecen mejor? Si no he aprendido, ya no hay solución.
Te nombro culpable de mi gris situación. 
Su mundo es tan lúdico...
Robaron mis mejores escenas.
Brillantes y lúcidos...
Parecen caminar sobre ruedas.

Puede que en realidad sea como tú.
Puede que en realidad seamos únicos.



"Dejadme entrar, seres únicos.
Por una vez, vedme único"

lunes, 17 de junio de 2013

Te no necesito

Llega un momento de tu vida en el que suceden demasiadas cosas a la vez, y todas se amontonan, sin avisar. Todo lo que siempre habías querido por encima de todo, de repente, ahí está. Ya lo tienes, después de tanto esfuerzo, ya lo tienes. Entonces sientes algo extraño porque, entre todo ese mar de satisfacción y felicidad, sigues teniendo esa sensación de vacío. Te falta algo. Llevabas mucho tiempo pensando que serías feliz consiguiendo todo aquello, y mucho tiempo esforzándote para hacerlo, pensabas que eso era el final. Y ahora te das cuenta de que no es el final, porque sigue faltando algo: has conseguido todo lo que querías, pero no lo que necesitabas.

A veces incluso desearías tener solamente eso que tanto necesitas y deshacerte de todo lo que querías.
Porque no se trata de conseguir todo lo que quieres, hay algo que necesitas por encima de todo lo demás, y eso es lo más difícil de conseguir, pero conservarlo es más difícil aún.


viernes, 7 de junio de 2013

Ser quien soy

Pero escribía otra vez, procuraba reportarse, y al cabo la indignación, la franqueza necesaria a su pasión, estallaban por otro lado. Y entonces era él mismo quien aparecía hipócrita, lascivo, engañando al mundo entero. "Sí, sí", decía. "Yo me lo negaba a mí mismo, pero te quería para mí. Quería, allá en el fondo de mis entrañas, sin saberlo (cómo respiro sin pensar en ello); quería poseerte, llegar a enseñarte que el amor, nuestro amor, debía ser lo primero; que lo demás era mentira, cosa de niños, conversación inútil. Que era lo único real, lo único serio el quererme, sobre todo yo a ti, y huir si hacía falta; y arrojar yo la máscara, y la ropa negra. Y ser quien soy, lejos de aquí donde no lo puedo ser".



sábado, 18 de mayo de 2013

Elige

Demasiado, nada es demasiado y todo es poco.
Los días perfectos.
Los descubrimientos insospechados.
Sensaciones desconocidas.
La música y las personas.
Un viaje de vuelta de madrugada.
El miedo a que todo cambie.
Replantearlo todo.
Recordar buenos momentos, y desearlos mejores.
Lo cotidiano, lo novedoso, lo extraño, lo de siempre.
Reír llorando y llorar riendo.
Lo que nunca viviste.

No sé, a mí sí me gusta esto. ¿Y a ti?


Porque no hay tiempo. Coño, no hay tiempo.
Ya has perdido demasiado.
Vive.


domingo, 12 de mayo de 2013

Hemos perdido aún

Hemos perdido aún este crepúsculo.
Nadie nos vio esta tarde con las manos unidas,
mientras la noche azul caía sobre el mundo.

He visto desde mi ventana
la fiesta del poniente en los cerros lejanos.

A veces como una moneda
se encendía un pedazo de sol entre mis manos.

Yo te recordaba con el alma apretada
de esa tristeza que tú me conoces.

¿Entonces, dónde estabas?
¿Entre qué gentes? ¿Diciendo qué palabras?
¿Por qué me vendrá todo el amor de golpe
cuando me siento triste, y te siento lejana?

Cayó el libro que siempre se toma en el crepúsculo,
y como un perro herido rodó a mis pies mi capa.

Siempre, siempre te alejas en las tardes
hacia donde el crepúsculo corre borrando estatuas.


sábado, 20 de abril de 2013

Pues eso

Llegas, posas las llaves. Enciendes la lamparilla del escritorio, te tiras en la cama con el abrigo aún puesto, y te quedas mirando a cualquier punto muerto mientras que intentas disimular. Cierras los ojos. Crees que va a suceder lo típico, lo que sucede en las películas, pero no sucede (en realidad sabías que no sucedería). Te resignas, te levantas, te quitas el abrigo y te enciendes un cigarrillo. Y como cada día, vuelves a darte cuenta de que nada va a cambiar. Otro día más, otro cigarrillo.

El último, ¿No? Como el de ayer. 
Luego piensas en que pronto llegará el verano y pronuncias en alto las primeras palabras desde que llegaste:
Menuda mierda.

viernes, 19 de abril de 2013

Y eso pasa

¿Un amor inevitable?
¿Dos personas destinadas?
Sí.
Y un cojón.

Amor lo llamaban

Que dejé de lado aquella mierda del amor de película.
Ahora no creo ya ni en el mundo.
Ahora creo en la gente ridícula.

viernes, 5 de abril de 2013

¡Abril otra vez! Sí

Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace. La gente que cultiva sus sueños hasta que esos sueños se apoderan de su propia realidad. Me gusta la gente con capacidad para asumir las consecuencias de sus acciones, la gente que arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño. Me gusta la gente que es justa con su gente y consigo misma, la gente que agradece el nuevo día, las cosas buenas que existen en su vida, que vive cada hora con buen ánimo dando lo mejor de sí, agradecido de estar vivo, de poder regalar sonrisas, de ofrecer sus manos y ayudar generosamente sin esperar nada a cambio. Me gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente, pero sin lastimarme ni herirme. Me gusta la gente que posee sentido de la justicia. Me gusta la gente que sabe la importancia de la alegría y la predica. La gente que mediante bromas nos enseña a concebir la vida con humor. La gente que nunca deja de ser aniñada. Me gusta la gente que con su energía, contagia. Me gusta la gente sincera y franca, capaz de oponerse con argumentos razonables a las decisiones de cualquiera. Me gusta la gente fiel y persistente, que no desfallece cuando de alcanzar objetivos e ideas se trata. Me gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza en reconocer que se equivocó o que no sabe algo. La gente que, al aceptar sus errores, se esfuerza genuinamente por no volver a cometerlos. La gente que lucha contra adversidades. Me gusta la gente que busca soluciones. Me gusta la gente que piensa y medita internamente. La gente que valora a sus semejantes no por un estereotipo social ni cómo lucen. La gente que no juzga ni deja que otros juzguen. Me gusta la gente que tiene personalidad. Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón. La sensibilidad, el coraje, la solidaridad, la bondad, el respeto, la tranquilidad, los valores, la alegría, la humildad, la fe, la felicidad, el tacto, la confianza, la esperanza, el agradecimiento, la sabiduría, los sueños, el arrepentimiento y el amor para los demás y propio son cosas fundamentales para llamarse gente.




miércoles, 27 de marzo de 2013

Demasiado

¿Sabes? A mí nunca me han gustado demasiado los cambios. Soy una persona que se aferra demasiado a la rutina, y eso lo veo como un defecto. Por eso, aunque no sea mi naturaleza, intento romperla. Siempre lo hago: escapo, si veo que se me juntan los problemas, o si veo que me ahogo, me voy. También soy muy contradictoria, si no me gusta estar demasiado tiempo en un sitio me voy a otro. "Desconectar", lo llaman. Yo lo llamo huir. Me largo de viaje, y ya está. Hago mil viajes, conozco otras culturas, otra gente, otros idiomas bla, bla, bla. 

Ahora es cuando entras tú. Tú, no sé ya como decirlo. Ahora mismo no lo crees, pero te sorprenderías. Tú estás en esa rutina. Si hago un pequeño recuento, en los dos últimos años he hecho dos viajes fuera de España, y ahí has seguido. Sigues dentro de mí, eres lo único de lo que no puedo escapar, lo único. Todos mis problemas se quedan en mi ciudad menos tú, me das la chapa en mi cabeza y estás conmigo todo el santo día y ni tienes que pagar por facturar en el aeropuerto, ni tienes que tragarte las horas de espera, hijo de puta. ¿Es un problema? Supongo, lo parece. El curso que viene me marcho a estudiar a Reino Unido y voy a estar fuera un año. ¿Seguirás en mi cabeza cuando vuelva? Tengo muchísimas ganas de comprobarlo. 

Yo antes, ingenua de mí, pensaba que se podía hacer algo. Que podría ser, salir bien. Ahora ya sé que no, que no podrá ser nunca. Por ello pongo tierra de por medAH, perdón, que eso no sirve. A ver, para que lo entiendas. He decidido que ya es hora de acabar con esto. Pero que no te hable no significa que te haya olvidado, que no me importes, no significa que no esté las veinticuatro horas del día pensando en tí, ¿Sabes? El peor sentimiento del mundo es fingir que algo no te importa en absoluto, cuando en realidad es lo único en lo que piensas. Eso es lo que pasa.

Aun así, no hablar contigo ni saber nada de ti no me preocupa en absoluto. Estoy convencida de que, incluso aunque me fuese de aquí años, décadas, qué se yo... Incluso aunque en todo ese tiempo no supiese nada de ti, volvería a encontrarte. Siempre lo hago, siempre. Porque se trata de ti y no de una persona cualquiera, no una persona que pasa por tu vida unos meses y luego se va. No, eres tú, y siempre vuelves (Por desgracia para mí). Aunque ni siquiera tú lo sepas...

sábado, 16 de marzo de 2013

Siempre lo he considerado una ventaja



-¿Qué?
-Me siento infinito.

"Aunque nada nos mantenga juntos, podemos derrotarles para siempre.Yo seré rey, y tú, tú serás la reina. Aunque nada les ahuyentará, tú y yo podemos ser nosotros mismos por un día. Podemos ser héroes solo por un día"

:)

Cosas que siempre pierdo

La funda de las gafas.
Las llaves.
El alambre del pan de molde.
El libro de gramática de inglés.
Los calcetines.
Los paraguas (Esto no tiene remedio).
El cargador del móvil.
Las horquillas/gomas de pelo.
Los nervios.

Esto es una gilipollez. Lo sé. No sé por qué lo hago.
Adiós.

miércoles, 13 de marzo de 2013

No me des explicaciones absurdas. Bueno, mejor no me des explicaciones de ningún tipo

"Todos cometemos errores", me decía. Claro, y por eso se supone que soy humana. Dudo que tú lo seas (pero ese es otro asunto). Igual yo tampoco lo soy. Bueno, el caso. A lo largo de mis 19 años he ido descubriendo poco a poco la clase de gente a la que tengo la desgracia de enfrentarme día a día. Gente a la que no entiendes, gente que se piensa que tiene poder sobre ti o gente que sabe bien cómo hacerte sentir un ser insignificante, porque sabe cómo hacerte daño. Realmente no lo entiendo. Piensas que les conoces, piensas que al fin y al cabo siempre habrá alguien que esté ahi para apoyarte cuando tengas un mal día, que entienda tus cambios de humor, que esté disponible a horas indecentes, alguien en quien confiar. Bueno, dejadme que exponga mi opinión: ese alguien no existe. Y si existe, está muy lejos de ser encontrado. Pero mucho. Total, que como ya sabemos todos, estamos y estaremos solos. Y no puedes esperar nada de nadie. Lo más triste de todo esto es que llegue un día en que te das cuenta de que te estás volviendo como ellos... Qué coño, ser buena persona no sirve de nada. Claro que, con un simple "todos cometemos errores", pues se arregla.

Claro que sí.

viernes, 8 de marzo de 2013

Otro mes después

Realmente nunca ha salido bien pero ya me conoces, me gusta arriesgar. Siempre te lo he dicho, porque siempre has sido la única que ha sabido todo sobre mí: si no me arriesgo, no sabré nunca lo que podía haber sido. Repito, nunca me ha salido bien, pero supongo que alguna vez tendrá que ser la buena, la que se hace esperar. Necesito decirte algo y, no sé si esa vez será la buena; no tengo ni la más mínima idea pero presiento que si no lo hago de una vez, estallaré.

Remontémonos al primer día que te vi, al día en que te conocí. Bien, pues esa misma noche, antes de dormirme lo último que pensé fue: "Quizá el mundo sí pueda ser un buen lugar para vivir, después de todo". Vale, eso para empezar. Y ahora te diré que desde ese día y hasta hoy, mi vida ha ido cobrando un poquito más de sentido a cada momento. No me mires así, es verdad: cada vez que sonríes tiro a la basura un problema, y ya he dejado de coleccionarlos. Todos los momentos que paso contigo me llenan, hasta el punto en que siento que cada día que pasa soy un poquito más feliz que el anterior, y tengo la certeza de que  al día siguiente seré también un poquito más feliz. Quizá seas esa persona que todo el mundo necesita tener en su vida, esa persona necesaria. Necesaria y especial, eres jodidamente especial, y necesito que sigas llamando a mi puerta cada noche y que nos tumbemos en el suelo a mirar el techo y a hablar de Anatomía de Grey. Necesito que sigas acompañándome al centro y al supermercado, porque sino me pierdo. Y necesito ver cómo caminas delante de mí, te giras para ver si todavía sigo ahí y me guiñas un ojo sonriendo. Necesito que sigas formando parte de mis días y necesito que estos seis meses duren eternamente, necesito que lo entiendas y necesito que me quieras, porque yo te quiero. Eso es lo que quería demostrar con todo esto, te quiero. Estoy enamorado de ti y, sinceramente, no sé si esta será la buena, pero te aseguro que no me arrepentiré de haberme arriesgado, porque nunca lo hago. Y menos si es por ti.

viernes, 8 de febrero de 2013

Canciones

Pones una canción. Cierras los ojos. Piensas.
Intentas pensar en una persona, pero esa persona nunca es la que tú quieres que aparezca, en su lugar siempre aparece otra. La misma, la de siempre.
Y pones otra canción, vuelves a cerrar los ojos y vuelve a aparecer.
Inevitablemente, siempre aparece, y la letra siempre habla de él.
Es una pesadilla... tras otra.

martes, 5 de febrero de 2013

En la sétima fila del cine

Con el vestido de tu cuerpo desnudo me he hecho unas cortinas para no ver este mundo, y es tan absurdo este frágil suburbio que me siento como un niño frente a un antidisturbios, con el alma casi rota por este constante crimen, cómo me exprime el no poder sentirte.

Malditos los humanos que asustaron a este cisne, ahora me siento sola y compongo mejor triste, menudo chiste fue perderte en el horizonte, ten cuidado con mi corazón por si se rompe. Y yo en las madrugadas más suicidas haciendo el Harakiri con alcohol en mi barriga y el desamor cobrándome intereses, como si pudiera repartir mi amor a esos burgueses.

Jodida dopamina que desprendo al verte, a este paso acabarán por declararte ilegal. Estoy bailando medio muerta con la suerte de perderte, pues eres la peor droga fabricada en la ciudad. Ya no me arropan sueños ni ilusiones, ahora duermo desnuda, esperando que algún día me perdones; no sabes lo que cuesta encontrar a alguien diferente entre tantos jodidos clones.

Ya no busco soluciones para estos problemas, pues ya son tantos que pienso coleccionarlos. Busco momentos de sonrisas semieternas contigo, para que almenos consiga olvidarlos. Cómo no volverse loco en esta cloaca: a falta de poesía esto sería la resaca de un millón de findes con vodka barato, bebiendo todo el tiempo para olvidarte solo un rato.

"Adiós" dijiste, pensando en un "hasta pronto", y otra tonta que se fue buscando lógica, como si no fuese una necesidad biológica el estar contigo. Cómo me exprime el no poder sentirte, y no poder amarte a oscuras en la séptima fila del cine.

Día Sexto.



domingo, 3 de febrero de 2013

.




Me gustas cuando dices tonterías,
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.

Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo.

O cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.

Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, lleno de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:

«Tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno».


Efímero



Aquella noche la chica se asomó a la ventana y miró a la luna. Entonces fue recordando, una a una, las caras de todos sus amigos. Comprobó, que, a medida que las caras iban cambiando, la luna crecía más y más, al igual que lo hacía su sonrisa. Entonces se dio cuenta de lo feliz que era ahora.

La chica cerró la ventana, su sonrisa reflejada en el cristal. Después se fue a dormir, pensando que, cada vez que volviese a sentirse desgraciada, miraría a la luna, para que protegiese su felicidad.

viernes, 25 de enero de 2013

No hay un límite

Volver a elegirlo cada día. Sentir como cada día eliges algo que no te conviene. Pero aun así lo haces, y sabes que te estás equivocando, sabes que siempre te equivocas, y que regresas a casa cada día preguntándote cómo pudiste, puedes y podrás caer tan bajo. Sí, porque nunca dejarás de ser humillada, nunca dejarás de hacer el ridículo, nunca dejarás de arrastrarte, y lo sabes. Es algo continuo, algo que parece no tener solución, ni final. Aun así, cada día vuelves a elegirlo. Pase lo que pase, venga quien venga, sea cual sea la situación, la circunstancia, el lugar o la hora. Siempre lo vuelves a elegir a él.

Lo peor de todo es que no quieres admitirlo -siempre es mejor echarle a él la culpa, e incluso a los demás-, pero sabes que solo tú podrás ponerle fin, y se supone que tendrás que hacerlo algún día...

Pero esto, claro, es solo una suposición.

sábado, 12 de enero de 2013

Y es por eso que me deprimo cuando escucho la Oreja de Van Gogh

Yo no tengo ningún "me pregunto qué sería mi vida sin él".
Tampoco un "puedes contar conmigo" en momentos de soledad.
Nunca he tenido un "Buenos días, princesa", y nunca me han regalado mil rosas mientras esperaba con la carita empapada. Creo que nunca me han regalado rosas. Tampoco eso de "tú y yo, solo tú y yo, ni siempre ni nunca", ni tardes de invierno por Madrid, ni nadie esperando sentado en mi portal.
No tengo un récord en quererme con nadie. Tampoco tengo un sitio que compartir los viernes por la tarde, y nadie me pidió que le diera un beso en una tarde en un bostezo de sol.
No he llenado de libros mi maleta, ni de fotos suyas de antes, ni he dibujado su sonrisa junto a la mía.
Tampoco me he dormido en un sofá con el abrigo de alguien.
Ninguna mirada ha buscado mi cara en una madrugada de un 20 de enero, saliendo de un tren. No he cogido un tren que no dormía, y no he visto su cara en un cristal.
Ahora mismo no existe un "quiero estar a tu lado" o un "quiero quererte o morir", o un "Nadie como tú".
Esto sí son deseos de cosas imposibles.





La diferencia

Está claro, está ahí todo el tiempo y hasta que no llegas al límite, no te das cuenta. Una vez que has tocado fondo, por fin lo ves: la diferencia entre estar enamorado y estar obsesionado. La diferencia entre un amor correspondido y una pesadilla. La diferencia entre una relación y una obsesión.
En el primer caso, al poco tiempo de experimentarlo desearías haber conocido a esa persona antes.
En el segundo caso, después de haberlo experimentado mucho tiempo te das cuenta de que desearías no haberla conocido nunca.
Ahí es donde está la diferencia.

Aun así todo sigue, siempe sigue, y sientes que nunca va a terminar.
Pero termina, porque todo tiene un límite infranqueable.
Porque después de todo, por muy inocente que seas no eres gilipollas.